La pintura es una de las tareas fundamentales del mantenimiento de las piletas, o de la instalación de las mismas. No hace falta gastar grandes cantidades de dinero en baldosas o azulejos para obtener un acabado excelente en nuestra pileta.
Las piletas de fibra, o las de poliéster, son un caso especial, ya que no tienen azulejos pero se pueden pintar a pesar de que llegue previamente pintada de fábrica, normalmente en blanco y el azul.
Como decíamos, las piletas de fibra pueden pintarse antes de su instalación, o pasado un tiempo, como medida de mantenimiento, ya que las piletas se deterioran por el uso. Y aunque las piletas de fibra se deterioren menos, también lo hacen; lo que los fabricantes recomiendan es pintarlas cada 4 o 5 años, pero esto depende siempre de la calidad de nuestra pileta.
Sobre cuándo debemos pintar, como siempre, lo recomendable es seguir las indicaciones del fabricante de piletas, pero seguro que siempre habrá algunas indicaciones comunes en todos los casos, como el pintar la pileta en días secos y sin viento y a la sombra para no alterar el secado de la pintura así como su adherencia. También dependerá de las especificaciones del fabricante el número de manos de pintura necesarias o la mezcla de la misma, y el tiempo de espera para su utilización.
Los colores mas habituales en piletas de fibra o poliéster son el blanco y el azul. El blanco causa un efecto óptico similar al de los océanos. Además puede producir el calentamiento del agua y el deslumbramiento es una muy buena opción y los resultados son magníficos. El azul por su parte es el color que menos se pierde con la profundidad, además tiene la cualidad de proporcionar la sensación de limpieza, profundidad y frescura.
También pueden utilizarse otros colores, pero suele ser desaconsejanble, por ejemplo, el color negro impide una óptica de profundidad y la visión de objetos o personas en su fondo. Y el color verde impide la visión de algas y moho.
Además en la pintura para piletas de fibra podemos crear diseños con diferentes temáticas en el fondo que generen una óptica diferente en la noche con la utilización de la luminaria.
Las piletas de fibra, o las de poliéster, son un caso especial, ya que no tienen azulejos pero se pueden pintar a pesar de que llegue previamente pintada de fábrica, normalmente en blanco y el azul.
Como decíamos, las piletas de fibra pueden pintarse antes de su instalación, o pasado un tiempo, como medida de mantenimiento, ya que las piletas se deterioran por el uso. Y aunque las piletas de fibra se deterioren menos, también lo hacen; lo que los fabricantes recomiendan es pintarlas cada 4 o 5 años, pero esto depende siempre de la calidad de nuestra pileta.
Sobre cuándo debemos pintar, como siempre, lo recomendable es seguir las indicaciones del fabricante de piletas, pero seguro que siempre habrá algunas indicaciones comunes en todos los casos, como el pintar la pileta en días secos y sin viento y a la sombra para no alterar el secado de la pintura así como su adherencia. También dependerá de las especificaciones del fabricante el número de manos de pintura necesarias o la mezcla de la misma, y el tiempo de espera para su utilización.
Los colores mas habituales en piletas de fibra o poliéster son el blanco y el azul. El blanco causa un efecto óptico similar al de los océanos. Además puede producir el calentamiento del agua y el deslumbramiento es una muy buena opción y los resultados son magníficos. El azul por su parte es el color que menos se pierde con la profundidad, además tiene la cualidad de proporcionar la sensación de limpieza, profundidad y frescura.
También pueden utilizarse otros colores, pero suele ser desaconsejanble, por ejemplo, el color negro impide una óptica de profundidad y la visión de objetos o personas en su fondo. Y el color verde impide la visión de algas y moho.
Además en la pintura para piletas de fibra podemos crear diseños con diferentes temáticas en el fondo que generen una óptica diferente en la noche con la utilización de la luminaria.
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