El agua es, sin duda, uno de los elementos esenciales para el desarrollo de la Humanidad. Además de beberla son numerosas las utilidades que le damos a diario. Pero, más allá de ayudarnos a cubrir ciertas necesidades básicas, hay otras menos conocidas y que, sin embargo, pueden resultar claves para mejorar nuestro bienestar general.
En esta línea de aportaciones en la
que hay que entender los beneficios de disfrutar de instalaciones
como un hidromasaje. Generalmente, se relaciona con sus efectos
relajantes, pero sus efectos positivos son mucho más amplios.
Efectos relajantes
Desde luego, una buena sesión de
hidromasaje contribuye como nada a disminuir nuestros niveles de
estrés y los de ansiedad. Ese masaje del agua tiene un efecto
relajante sobre los músculos, que evita que se tensen y las
consecuentes posibles lesiones. En este sentido, está especialmente
aconsejado para las personas con problemas a la hora de dormir.
Efectos sobre la circulación sanguínea
En otra línea de efectos, hay que
destacar los que proporciona a nivel de circulación de la sangre,
ayudando a descongestionar las piernas. Por eso, y porque es un buen
sistema para eliminar toxinas, ayuda a combatir la celulitis.
Potencial antinflamatorio
En general, el hidromasaje ayuda en
los procesos de lesiones musculares y de problemas articulares,
gracias a su potencial antiinflamatorio. Y, a su vez, está
recomendado para personas que
sufren ciertos problemas crónicos que cursan con dolores
más o menos intensos, desde las migrañas y jaquecas a las
artritis, por citar los más comunes.
No hay comentarios:
Publicar un comentario