Los
pasados meses de diciembre y enero han reportado unas cifras de
beneficios desconocidas para los establecimientos comercializadores
de piletas de lona y splits. Con unas temperaturas tan altas y tan
continuadas estos recursos eran la solución más asequible para la
mayoría de los argentinos.
Y es que, hay que
recordar que según los propios expertos en climatología, tantos
días seguidos en los que los termómetros rondaban los cuarenta
grados no se recordaban en este país. Y, ya se sabe que el agua es
uno de los pocos mecanismos que permiten combatir esos rigores.
Piletas de lona agotadas
Esa es la explicación
de que las piletas de lona de tamaño familiar hayan desaparecido
vertiginosamente de los almacenes de los comercios.
Cualquiera que
dispusiera de un pequeño patio o terreno en el que poder montar uno
de estos artículos (En qué casos está recomendada la instalación de piletas de lona), se ha lanzado este verano a comprarlo sin
pensarlo dos veces.
De hecho, son los propios distribuidores quienes
han señalado que no creen que queden existencias almacenadas de este
producto en ninguna tienda del país.
Splits
Junto con las piletas
de lona, también se han disparado las ventas de split. Estos
electrodomésticos han permitido que se haya podido hacer una vida
normal y dormir en muchas viviendas argentinas, en las que hasta este
verano no habían hecho falta.
Es más, quienes ya contaban con algún
aparato de aire acondicionado, muy probablemente hayan adquirido
alguno más estos meses.
Fluctuación de precios
Este incremento de
ventas y, sobre todo, la falta de existencias han hecho que los
precios hayan fluctuado. De forma que, quienes los compraron en las
primeras semanas hayan pagado un precio más razonable.
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